miércoles, 3 de julio de 2013

El Golpe de Estado en Egipto



Hoy, el Medio Oriente fue sacudido por un golpe de estado, en Egipto.  Luego de varios días de manifestaciones masivas, el ejército intervino, para preservar el orden, y defender los intereses de millones de ciudadanos.  Fue un capítulo más en la historia convulsionada de Egipto.


Para entender lo que pasó hoy, tenemos que volver al año 2011.  En ese año, Hosni Mubarak fue destituido, luego de 30 años como presidente de Egipto.  Su destitución fue parte de la ‘Primavera Islámica’ que sacudió los países musulmanes, a partir del año 2010.  En ese tiempo, el ejército apoyó a Mubarak, y participó en ataques contra la población civil.  Pero fue en vano; la democracia ganó, y Mubarak fue destituido.


 
La destitución de Mubarak, dio lugar a elecciones presidenciales en 2012, en los cuales  Mohamed Morsi fue elegido como el nuevo presidente de Egipto.  Él representaba a los Hermanos Musulmanes – una agrupación de islámicos radicales, que deseaban establecer una sociedad musulmana más estricta.  Inicialmente, los Hermanos Musulmanes prometieron renovar el país, y no imponer un sistema islámico radical en Egipto.  Sin embargo, Morsi no pudo superar la crisis económica que heredó cuando comenzó a gobernar.  Tampoco frenó a los Hermanos Musulmanes. 


Poco a poco se fue imponiendo un sistema islámico más radical, cortando la libertad de las mujeres, y amenazando la existencia de la Iglesia Cristiana Copta.  Durante su año como presidente de Egipto, la gente continuó sufriendo por los problemas económicos que se agudizaban - un alto índice de desempleo,  la escases de elementos básicos (como el gas y la gasolina), y el alza de los precios de los comestibles.  


En los últimos meses, la población, ya cansada por las dificultades económicas, y preocupadas por la amenaza de un régimen islámico radical, comenzó una serie de protestas masivas, que se radicalizaron al cumplir el primer año del gobierno de Morsi.  







 Hoy, en un golpe de estado, el ejército destituyó a Morsi – un acto que fue aplaudido por millones de egipcios.    


 
¿Por qué nos debe interesar lo que está pasando en Egipto en este tiempo?  Por TRES razones principales:

1.    El Señor prometió que antes de la Segunda Venida el evangelio sería predicado en todo el mundo.  En los países musulmanes, ha sido casi imposible predicar el evangelio por 1,200 años.  Antes que el Señor venga por segunda vez, debe haber una apertura al evangelio en los países islámicos que permita la predicación del evangelio, y una gran conversión de personas a la fe en Cristo.  El ataque contra un régimen que favorecía un islam radical nos parece oportuno.  Dios quiera que sea parte de un movimiento que irá creciendo, y que un día brindará libertad religiosa en los países musulmanes para la predicación del evangelio.


2.    En Egipto existe una de las iglesias cristianas más antiguas – la Iglesia Copta.    



     Sus raíces se remontan a los grandes héroes de la fe como Clemente, Orígenes, y Atanasio (quien defendió la doctrina de la divinidad de Cristo, contra el arrianismo).  Actualmente, hay unos 7 millones de cristianos coptos en Egipto.  Ellos estarán aliviados por la destitución de Morsi, y la crítica implícita a los Hermanos Musulmanes, quienes deseaban destruir la Iglesia Copta. Debemos orar al Señor que derrame Su Espíritu sobre esa Iglesia, para que los creyentes se levanten a proclamar el evangelio en Egipto.

3.    Hay una profecía en la Palabra de Dios que indica que un día muchos en Egipto conocerán al Señor:

En aquel tiempo habrá altar para Jehová en medio de la tierra de Egipto, y monumento a Jehová junto a su frontera.  Y será por señal y por testimonio a Jehová de los ejércitos en la tierra de Egipto; porque clamarán a Jehová a causa de sus opresores, y Él les enviará salvador y príncipe que los libre.  Y Jehová será conocido de Egipto, y los de Egipto conocerán a Jehová en aquel día, y harán sacrificio y oblación; y harán votos a Jehová, y los cumplirán.  Y herirá Jehová a Egipto; herirá y sanará, y se convertirán a Jehová en aquel día, y les será clemente y los sanará. En aquel tiempo habrá una calzada de Egipto a Asiria, y asirios entrarán en Egipto, y egipcios en Asiria; y los egipcios servirán con los asirios a Jehová.  En aquel tiempo Israel será tercero con Egipto y con Asiria para bendición en medio de la tierra; porque Jehová de los ejércitos bendecirá diciendo, Bendito el pueblo mío Egipto, y el asirio obra de Mis manos, e Israel Mi heredad  (Isaías 19:19-25)